viernes, 30 de abril de 2010

La paz que busco





     No estoy en una época de muchas palabras...de recibir mucha infomación. Siento que con las que tengo son suficientes...incluso estoy deshaciéndome de muchas de ellas. Sé que en un momento pueden ser fundamentales y ayudarte...... sobretodo en los despistes que todos tenemos.
    Mi viaje no tiene retorno y definitivamente voy hacia adentro no hacia afuera. 
¡Qué de palabras bonitas....biensonantes...que son sólo palabras!.
    Sólo basta con detenerse, pararse y no querer llegar a ningún lado, a ninguna meta.    
   No es fácil porque parece que siempre tenemos que conseguir algo más.....incluso también la necesidad de ser más espirituales.....de llegar a no se sabe donde...siempre más y más.
   Tenemos tan metida dentro la idea de acumular que queremos acumularlo todo.            
   Cuando hablas con alguien, parece que te valora más si has estado en muchos lugares, has hecho muchos cursos, has leido mucho, has probado mucho....sabes de todo mucho. Si no es así...como que te dejan de lado.
   Nadie te pregunta por tu proceso interno, por cuantas sonrisas has dado hoy, cuanta ternura...cuanto amor...cuantos pájaros o cuantas estrellas has contado en el firmamento.
   Soy vulnerable...totalmente vulnerable.....por eso muchas veces ni yo misma me entiendo. ¿Será que me estoy queriendo hacer la fuerte?. ¿Será que no acabo de asimilar las cosas porque no quiero entrar en profundidad en ellas?. ¿Será que pienso que todo está bien y es sólo una fachada y tendré que pagar un precio por esto?. Intento ir al fondo...siempre intento ir al fondo, porque siento que el ego es muy astuto y siempre se las arregla para entrar por algún lado.
   La única medida que tengo para saber si voy bien soy yo misma. ¿Cómo me siento?. Me quedaría totalmente absorta en la mirada de ese bebé.
   Es la paz que busco...pero que no está constantemente en mi vida. Es como si estuviera buscando a Dios en todo y quisiera encontrarlo en un abrazo profundo....sin palabras. 
Y que Dios me dejara apoyar mi cabeza en su hombro...también sin palabras.... y que de una vez todas mis lágrimas limpiaran profundamente mi alma.
mária

3 comentarios:

  1. Hola maría!!Qué hermoso fluir del pensamiento. Cuánto coincido con tus palabras. Hoy deseo que Dios me dejara apoyar mi cabeza en su hombro y que de una vez todas mis lágrimas limpiaran profundamente mi alma.
    Besosssss

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  2. María, al igual que Graciela coincido en muchas de las cosas que has escrito que siento te salen del alma.
    En nuestro día a día nos valoran por lo que tenemos no por lo que valemos como personas.
    A veces sentimos una necesidad enorme de llorar, de limpiar nuestra alma como decís, yo en ocasiones me siento igual y lloro. No es malo llorar, al contrario... nos purifica el alma.

    Besos a las dos.

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  3. Un grande abrazo de Luz para ti Maria.
    Gracias por tu visita y tu valioso comentario.
    Kyra

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Gracias!!