Dos niñas en los árboles

 Ayer de verdad fué un día especial, disfruté muchísimo. Me encantó comprobar que todavía estamos para esas escaladas, y sin rompernos nada pero con los rasponazos de rigor que nos dan más mérito.
Los árboles han crecido mucho a lo ancho (como alguna, que no eres tú) y a lo alto. Se estaba estupendamente ahí arriba, charlando, "filosofando", como antes, tranquilamente.  Qué agradables las ramas, las hojas, la luz, las hojas y las bellotas abajo en el tejado, las hormigas mutantes a las que no quisimos hacer caso y nos correspondieron, la altura desde la que se veía tan bien. Nos reímos de nuestras arrugas, pusiste palabras a cosas que sabía pero que nunca se me había ocurrido pensar y me enorgullecí de tu sabiduría.
Cuando nos fuimos noté que tenía una sensación enorme de... consuelo.
Mil gracias por la idea, por contar conmigo y regalarme parte de tu cumpleaños.
Felicidades.
Eva.                                                        

                                                                                           

 Y sí...a este árbol y a una encina, nos subimos la menda y yo. Y ni caso que no le sobra ni un gramo. 

Y cuando la miro...y veo que tiene los ojos llenos...los mios tambien se llenan. No sé o si sé, por qué motivo nos emocionamos. 

Las hormigas, si es que eso de ese tamaño eran hormigas, queda claro, que aunque te pongas en medio de su ruta, si ven tu alma de niño ni te molestan. Tú sabes que todo lo que tenemos que aprender nos lo enseña la naturaleza, pero sólo cuando la miras con los ojos del alma.

Y de las arruguitas que te voy a contar!........Que nos ha costado muchos años construírnoslas, mucho esfuerzo, muchas risas y tambien muchas lágrimas...como para ponermos en manos de un cirujano...que seguro que nos las roba. 

                                       

Extraña sensación la de volver a tu casa y mirar hacia la tapia, donde estaba la mía, e intuir esos adosados o chalets, o lo que sea, que nunca me he querido enterar...no he sido capaz de volver a pasar por delante en doce años. Pero ahora siento que he aprendido el sentido de la vida   y  lo que es importante y lo que tambien lo es, pero no  puedes cambiar...y sólo te queda aceptarlo. Una palabra muy usada......fácil de decir ...difícil de sentir...pero sencilla y simple cuando así lo sientes.
Tú me entiendes, se que me entiendes porque has vivido al lado mío durante muchos años, desde que teníamos seis.. No lo sé, a lo mejor infinitos y como te dije una vez, aún siendo tan diferentes, nutriéndonos una de la otra.

Nuestro idioma sólo tú y yo lo entendemos. Me basta decirte: árbol, roca, tesoro, riachuelo, prado, gusanos, moras, tormenta, piscina, grillos, la arena, frutero, estrellas.... y ya estamos ahí .
En todas y cada una de esas noches infinitas mirando las estrellas, filosofando, con ese horror espantoso que teníamos a crecer. Y sintiendónos en la posesión más absoluta de la verdad, sintiendo el sentido de la vida  como sólo se puede sentir a esa edad.... y que en algún momento perdimos...... al menos yo.
Y toooooda la vida viviendo  para terminar descubriendo lo que ya sabíamos...que todas las respuestas están en las estrellas....en nuestro corazón.
Gracias
mária


PD: Que sepa todo el mundo que mi amiga del alma no es seguidora con icono de mi blog, pero si de corazón...y eso me encanta. Y sin tu permiso y sabiendo el horror que tienes a estos medios publico tus fotos. Sé que todo me lo perdonas.