Te quiero con toda mi alma y todo mi corazón.

Gaviotas silenciosas vuelan sobre mí.

El sonido incansable de las olas me trae recuerdos de mi niñez...el reflejo del sol en el agua llena mi cuerpo de amorosas nostalgias.

¿Quién era....quien soy?...Donde está la niña que fuí?. Siento que sigue habitando en mí, pero soy algo nuevo, diferente.

Mi cabello vuela libre...salvaje.

Estoy...soy...soy el mar, el sol...esa brisa que sentí ayer por primera vez en mi cuerpo, como algo físico. Movía las piernas para asegurarme que no tenía nada encima, ....era el roce del aire que sentía intensamente en mi cuerpo, sentía su peso...ligero y suave.

Anoche la luna vino a saludarme de una manera nueva... hermosa... diferente.

Luna roja...luna naranja. Inmensa luna que despedía al sol... brillante, nítido y puro, en esa hora mágica que transforma todo con su luz y que siempre me ha fascinado. 

Y el sol se va escondiendo en el horizonte y es de una belleza absoluta....absoluta. 

Creo que la luna tuvo algo de envidia y me dijo: "espera y verás". Su belleza naranja... inmensamente grande, también absoluta, perfecta.

El mismo sol y la misma luna para todos.....y cada día con una nueva belleza diferente.

No sé por qué pienso en tí ahora de una forma diferente. Leo un libro y como siempre me da claves, me pone en mi sitio, me centra.

Hay en el cielo una cometa y una gaviota.

Y vuelvo a sentir una idea diferente del amor, más amplia aún..... o me siento diferente ante él. Es el amor que da sin esperar absolutamente nada. Ahora lo entiendo...no...ahora lo siento. No sé por qué motivo me basta con mi amor, me basta con amar...porque siento que ese amor me hace más grande. Sí, así es...me engrandece porque al fin no me genera tensión, no me genera angustia, no espero nada, no pido nada.

Por primera vez atisbo el placer de amar.

Experimento y vivo el amor y digo que te amo a tí, ahora... y no sé por qué, ni para qué, pero al fin he comprendido y sentido lo que es amar, amar sin ningún tipo de sufrimiento. En eso estoy y no quiero perderlo. Es mi punto débil el amor...porque siempre me descoloca....siempre me ha descolocado.(No te creas, que como siempre tengo a mi abogado que me dice:....no será que te cierras otra vez para no sufrir?). 

Me lo  sé ... me lo sé...pero el hecho de ser consciente de cuales son mis debilidades me ayuda a crecer. 

Y no soy la misma que me fuí hace cuatro días...no. El sol me ha rellenado por dentro y por fuera, pero creo que vuelvo aún más ligera.

 Es curioso....me fascina como se hace la vida instante a instante y como puede cambiar la nuestra con cada persona que aparece en ella.

Remueve....cambia...se recoloca, no sin antes haberse descolocado.

No sé....si fueramos más conscientes de todo nuestro poder....si pudiéramos elevarnos....como hago tantas veces.....y mirarnos desde arriba.

No me canso de decir lo mágica y maravillosa que es la vida...cuando se vive.

Y cómo los hilos de ella están en nuestras manos!....más de lo que pensamos!.

La felicidad no te toca como una loteria, la felicidad te la haces tú día a día a día.

 Eres inmenso....tu corazón está lleno de amor. Sabes mucho...eres generoso y bueno. ...

Sólo voy a quererte y llenarte de todo lo bueno que te pueda dar.

Hoy te siento pequeño, niño, mimoso, amoroso. Tienes tanto para dar....tanto....

Y hablando de niños...ayer me hice daño en un pie bajando por unas escaleras mecánicas que subían.

Había que correr mucho para bajar.....y fué diver.

Ah!...y jugando a los bolos gané dos de tres partidas. No voy a crecer nunca....verdad???.

Creo que hoy me echaré una siesta. Me levanté a las cinco de la mañana.

Estoy viendo mis camelias rosas que han florecido en estos días.

Te quiero con toda mi alma y todo mi corazón. 

Y me pongo en tu lugar y me moriría de gusto.....

Texto y foto: mária